Lila Avilés encuentra en Tótem su amuleto de la buena suerte
La cineasta mexicana mostró su nuevo filme elegido para representar a México en la carrera rumbo al Oscar 2024; habló de los prejuicios y etiquetas a cineastas
Cuando la directora Lila Avilés pensó en su segundo filme, inmediatamente supo que quería que fuera Tótem, pero jamás imaginó que esta historia tan personal sobre transitar el duelo en familia, dedicada a su hija, conectaría de tal forma con la crítica y audiencia que la llevaría a acercarse a la posibilidad de obtener un Oscar.
Su película fue elegida para representar a México en la terna de Mejor película extranjera y, aunque aún no forma parte de la selección final, asegura que compartirá un espacio con cineastas e historias de todo el mundo que admira.
“Ha sido extraordinario todo lo que está pasando con la película, que por suerte ha viajado como loca y con mucha distribución, y sí puedo decir que es el sueño de cualquier cineasta.
“No sabemos qué va a pasar, pero ya estar ahí es un logro, porque todas son películas de gente maravillosa y amantes del cine, entonces ser parte de eso es bellísimo porque, además, este año en particular hay películas extraordinarias y ya sólo formar parte de esa generación de maestros para mí es un logro total, pero claro que vamos a acompañarla hasta lo que se pueda”, compartió Avilés, en entrevista.
Su obra, que forma parte de la competencia de Mejor largometraje mexicano del Festival Internacional de Cine de Morelia, se centra en Sol (Naíma Sentíes), una niña de 10 años que vive junto a su familia el duelo de ver a su papá enfermo.
El argumento se desarrolla todo en un mismo día, en el que, a través de una fiesta de cumpleaños, los integrantes de su vasta familia, desde la más chiquita hasta el más adulto, van asimilando la situación cada uno, impregnando la narrativa de creatividad y juego.
La versatilidad de sus personajes también se vio en el set, donde la directora mezcló artistas con y sin experiencia, en un elenco que incluyó niños, adultos y animales.
“Amo el proceso actoral, porque ahí está la médula de mi búsqueda como cineasta, y trabajo con muchos también no actores, pero lo que siempre busco es que haya algo en su esencia, en esa persona, que te dé algo más para el delirio de la búsqueda de la verdad en cada escena y es el secreto del cine, entonces yo sabía que mi casting iba a ser muy complicado.
“Se nos dice mucho, no trabajes con animales y con niños, pero para mí fue todo lo contrario. Ahí estaba lo maravilloso y la belleza, y lo que fue muy lindo, en específico con ellas (las dos actrices más pequeñas del elenco), porque su energía nos permeó en el espíritu de la filmación y esta cosa pesada de ‘tenemos la película encima’, esto le dio ligereza”, destacó la creadora, compartiendo que idearon dinámicas como el baile de la victoria o cantos entre todos.
“Y con todos pasó eso, fue regresar a ese espíritu de infante, a jugar, a sentirnos cómodos, así que quiero hacer un chorro de películas más para seguir a este par mientras van creciendo”, agregó emocionada, la cineasta.
Su largometraje cuenta con un elenco de múltiples protagónicos como Sentíes, Mateo García, Montserrat Marañón, Marisol Gasé, Teresita Sánchez, Saori Gurza e Iazua Larios, entre otros, quienes acudieron sonrientes al encuentro a prensa, haciendo porras para la película y hasta organizando una conga para celebrar el éxito que está teniendo, mostrando que su química familiar traspasó las pantallas.
La directora, que con su primer filme La camarista (2018) representó a México en los premios Oscar y Goya en 2020, aseguró no ser de las creadoras que tienen una fórmula específica sobre el tipo de historias que quiere contar sino ser más bien de las que se dejan llevar.
Su talento, confianza y corazonadas detrás del lente le han dado resultados, por lo que compartió que se siente sumamente motivada de seguir creando y explorando nuevas tramas.
“Amo ser cineasta, ya no me veo haciendo otra cosa, así que si la vida me da, quiero ser viejita y seguir buscando hacer mis historias. Me parece importante seguir con esta búsqueda como realizadora, adaptarme a otros formatos y seguir jugando.
“Así nació Tótem, de una idea que se fue adaptando y cambiando, hasta ser una película un poco más loca que la anterior y ya veremos qué trae la que sigue. Porque sí hay este prejuicio de que si la primera fue de tal forma, entonces todas las demás tienen que ser así, pero creo que eso es lo lindo, encontrar la esencia de cada proyecto por sí mismo, es como con los hijos que tienen la misma educación, pero son diferentes”, finalizó Avilés, recalcando que siempre estará en busca de esa versatilidad.
Tótem también fue nominada a los Gotham Awards.